Este aprendizaje es independiente de Syriza,
es independiente de la izquierda, es independiente de que los sucesivos
gobiernos helenos hayan cometido errores, es independiente de que Grecia sea
una economía poco competitiva e incluso de admitir que le fuera necesario
realizar importantes reformas. Tiene que ver más bien con el peso de los
diferentes actores en el proyecto europeo, con sus valores, con sus políticas y
con sus relaciones de poder.
1) Que
Europa no es, como se nos decía, una federación de naciones libres y
solidarias, sino un imperio neocolonial, cuya metrópolis es Alemania. El resto
de países solo son protectorados.
2) Que
quien tiene el dinero tiene el poder. No existe una relación de socios entre
los Estados, una relación entre iguales. Los acreedores son los amos, los deudores los esclavos.
3) Que
los amos están dispuestos a todo con tal de mantener su posición: a dictar las
normas internas de un país, a derrocar gobiernos, a intimidar a la población, a
fomentar las desigualdades, a expulsar a los disidentes y a humillar a los
opositores.
4) Que
la capacidad de cortar el crédito para ahogar la economía de un territorio, en manos
del Banco Central, es decir de Alemania, es un arma con tanto poder de
devastación como una bomba nuclear. El uso de esta capacidad para imponer
objetivos políticos es terrorismo financiero.
5) Que
lo que digan los pueblos carece de valor.La democracia es una ficción si
coincide con la opinión de los amos, o una afrenta si discrepa. Si este último fuera
el caso la decisión del pueblo no solo será incumplida sino castigada con severidad.
6) Todos
los gobiernos están obligados a cumplir y hacer cumplir la política económica
de los amos, resumida en el lema neoliberal: más mercado, menos Estado.
7) Los
gobiernos que cuestionen las reglas serán humillados ante sus votantes, sus
pueblos sometidos a escarnio público. Lo cual debe servir de ejemplo a
potenciales opositores.
8) Todos
los gobiernos europeos son colaboracionistas del poder alemán. Su aceptación de
las reglas de juego no es realismo sino servilismo, reconocimiento de su
debilidad frente al poder de los amos.
9) El
gobierno griego ha sido el único hasta en la fecha en rebelarse. Se debe honrar
su valentía, pero no ha sabido medir la
correlación de fuerzas. Este ha sido su único defecto.
10) Ante
la posibilidad de que se incremente aún más la miseria de su pueblo, abocado a
la inmediata bancarrota y a la salida del euro, el gobierno griego ha optado
por la rendición. Grecia ha renunciado con ello a su soberanía.
11) El
pueblo griego, incluso en su derrota, contará con el mérito de haber hecho
visible el monstruoso engendro que se esconde bajo el disfraz progresista,
demócrata e igualitario que llaman Europa, a fin de que los demás esclavos
podamos despertar.
12) La
Troika exigirá a los griegos en el próximo Eurogrupo cantar el himno de la
alegría de Schiller para celebrar el día de la Construcción europea, como hacían los nazis cantar las
óperas de Wagner a los judíos en los campos de exterminio.